Es solo pura casualidad que mi último post incluyera, como esta receta, el curry. No es que siempre usaré curry en las recetas que hago, sino que al final el curry es tan rico que pega con muchas cosas.
Mi hermana Liv o #Sister (como la tengo etiquetada) encontró esta receta en el blog Cocina y vino y salimos disparadas para el súper a comprar los ingredientes que no teníamos en casa.
La receta es la siguiente:
Ingredientes
- 5 pechugas deshuesadas
- Un paquete de puerro cortado en trozos.
- Un pimentón rojo y uno verde cortado en cuadros
- Media cebolla picadita
- 1 1/2 taza de leche de coco
- Una cucharadita de sal
- 2 cucharadas de Salsa Inglesa
- 2 cucharadas de curry en polvo
- Sal y pimienta
- Aceite
Preparación
Cortar las pechugas en trozos grandes, sazonarlas con los ajos, sal y salsa inglesa. Dorarlas en aceite y reservar.
En otra olla, sudar el puerro, los pimientos y la cebolla. Luego de que el sofrito esté listo, se le agrega el pollo, seguida por la leche de coco y el curry. Remover bien y dejar 15 minutos para que el pollo se termine de cocinar en la salsa.
Obviamente, la receta es para alimentar una trulla. Liv y yo hicimos 2 pechugas y utilizamos 3 dientes de ajo para sazonarlas, como también no utilizamos los pimientos enteros (esta vez obviamos el pimiento verde porque a nosotras no nos gusta). Con las 2 pechugas comimos 3 personas y sobró. A mi mamá le gustó (y eso, que es medio quisquillosa con la comida) y a Liv y a mí, ni se diga.
Esta receta es un éxito total; un ''Must'' en mi cuaderno de recetas. Como dije anteriormente, es fácil de hacer y es algo muy sabroso que se hace en poco tiempo. Así que no hay excusas para comer malo.
Amelia.
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